Quizá ya sepas lo que es una copa menstrual, pero por si aún no lo tienes muy claro, hoy te lo vamos a explicar y también te daremos 10 razones por las que cambiarte a ella.
La copa menstrual es un pequeño recipiente fabricado en silicona médica hipoalergénica (en la mayoría de los casos) en forma de copa que se utiliza para recoger el flujo menstrual en lugar de absorberlo (como ocurre con los tampones) y por tanto, protege la flora vaginal, manteniéndola en equilibrio. (Puedes leer más sobre qué son las copas menstruales en este enlace).
Las copas menstruales están llegando poco a poco al mercado y se están haciendo un hueco bien merecido, convirtiéndose en una fabulosa alternativa al uso de tampones y compresas. Muchas son las ventajas de utilizarlas. Hoy os presentamos 10 razones para cambiarse a las copas menstruales:
1 La primera de las razones ya la explicamos al inicio del post. Radica en que a diferencia de los tampones y de las compresas, la copa menstrual no absorbe el flujo, sino que lo recoge, evitando cambios en la flora vaginal y respetando su equilibrio.
2 Se puede utilizar durante muchas horas seguidas sin necesidad de tener que cambiarse. Una copa menstrual se puede utilizar entre 8 y 10 horas seguidas sin necesidad de vaciarla. Algunas mujeres nos cuentan que incluso llegan a utilizarlas 12 horas seguidas sin problemas.
3 Tienen una gran capacidad. Debes elegir bien tu tamaño de copa menstrual (dependiendo de la cantidad de flujo o de tu edad) para no sufrir escapes o pérdidas no deseadas. Los “accidentes” mientras utilizas la copa menstrual son muy improbables. Hay mujeres que por su actividad, deciden incluso utilizarla los días previos al comienzo del periodo para no llevarse sorpresas.
4 Son reutilizables y tienen una durabilidad de aproximadamente 10 años, lo que significa que ahorrarás mucho dinero en productos de higiene femenina. Es la solución más económica. (Puedes comprobarlo leyendo este post)
5 Ayudarás al medio ambiente. Son la solución más ecológica para la menstruación. (Imagínate los desechos que suponen para el medio ambiente la cantidad de compresas y tampones que se tiran).
6 No se notan. Son pura comodidad. Muchas mujeres nos comentan (y yo lo corroboro) que hay ocasiones en que se olvidan de que la llevan puesta de lo cómodas que son!
7 No desprende olores desagradables (como ocurre con otros tipos de protectores menstruales, como por ejemplo las compresas).
8 El uso de copas menstruales no está asociado con el síndrome de shock tóxico (SST).
9 Pueden utilizarse para realizar todo tipo de actividad deportiva, acuática, etc.
10 Tienen un mantenimiento muy sencillo, basta con esterilizarlas antes y después de cada ciclo menstrual, lavarlas con agua en cada cambio que realices (2 ó 3 veces al día), y guardarla en su bolsita de tela hasta el siguiente ciclo. Nunca ha de guardarse en un recipiente cerrado, deben guardarse en un lugar bien transpirado, para evitar la proliferación de bacterias.