Las copas menstruales están de moda. Es incuestionable.
Tal y como ya ocurriera hace unos años con las bolas chinas, ahora le ha tocado el turno a las copas menstruales. El debate sobre su uso ha llegado incluso a la esfera política con la CUP como defensora a ultranza del uso de este dispositivo. Pero, ¿sabemos realmente qué son las copas menstruales?
Como su nombre indica, las copas menstruales son un dispositivo vaginal en formas de copa o vaso, destinadas a recoger el flujo menstrual. A diferencia de los tampones que también son de introducción vaginal, las copas recogen el flujo menstrual en lugar de absorberlo, protegiendo así la flora vaginal.
A diferencia de los tampones y las compresas que hay que cambiarlos cada pocas horas, las copas menstruales pueden utilizarse durante 10 – 12 horas seguidas. No sólo eso, sino que como las copas menstruales quedan “alojadas” en la vagina cómodamente sin que se sientan en absoluto, son el método que más nos acerca a que podamos olvidarnos de que tenemos la regla.
En el mercado existen varios tipos y tamaños de copas menstruales. Es importante elegir bien tanto el canal de compra como el tipo de copa menstrual en sí. El canal que más garantías sanitarias ofrece son las farmacias y parafarmacias. Muchas parafarmacias ofrecen servicio on-line, al igual que otros establecimientos como los herbolarios.
En cuanto al material con el que está fabricada la copa menstrual, es fundamental que sea de primera calidad, ya que estamos hablando de un dispositivo que va a estar insertado en nuestro cuerpo (en una parte tan delicada como es la vagina), durante muchas horas y durante varios días seguidos. Por tanto, es importante que el material sea hipoalergénico y de máxima calidad. El mejor material que podemos recomendar es la silicona médica o hipoalergénica.
La silicona médica es uno de los materiales más duraderos que existen. Al poder reutilizar tu copa menstrual durante años, no sólo le estarás haciendo un favor a tu bolsillo, sino que estarás protegiendo el medio ambiente. Las copas menstruales son el método más ecológico que existe en el mercado.
Suelen existir dos tamaños disponibles por cada modelo de copa menstrual. Esto se debe a que dependiendo de ciertos factores como la edad y el hecho de haber tenido algún parto vaginal (o no) la musculatura del suelo pélvico (donde irá insertada la copa vaginal) se encontrará en un estado u otro (más o menos firme) y por tanto necesitaremos un tamaño mayor o menor.
En general, el tamaño pequeño se suele recomendar para mujeres menores de 25 años y/o que no hayan tenido partos vaginales. Por contra, el tamaño grande se recomienda a mujeres mayores de 25 años y/o que hayan tenido algún parto vaginal.
Otro de los factores importantes a tener en cuenta a la hora de elegir el tamaño correcto es la cantidad de flujo menstrual. Independientemente de tu edad, si tienes reglas con abundante flujo menstrual, te recomendamos el tamaño grande, ya que tiene mayor capacidad que el pequeño.
Al margen del tamaño y modelo que escojas, lo que está claro es que las copas menstruales han llegado para quedarse. De hecho, resultan tan cómodas, saludables y económicas que si las pruebas, casi te podemos garantizar que ¡no querrás volver a saber nada de las compresas ni de los tampones!